Gracias por todo, querido Pipo
Se nos fue Pipo.
Bartolomé Clavero Salvador, jurista, profesor, defensor de los derechos humanos y la diversidad cultural, con quien tuvimos el privilegio de compartir trabajo y formación, falleció ayer viernes. Como miembro del Consejo Asesor de Almáciga y, ante todo, como amigo, su marcha nos deja un gran vacío. Algunos de nosotros comenzamos nuestra andadura solidaria con los pueblos indígenas gracias a su motivación, empuje y ayuda.
Pipo trabajó incansablemente por los derechos colectivos de los pueblos indígenas, desde la universidad, como miembro del Foro Permanente para las Cuestiones Indígenas y a través de su compromiso personal. Y tuvo una importancia capital en las transformaciones constitucionales de América Latina hacia la diversidad y el pluralismo, pues comprendió como nadie la profundidad y la urgencia de tales cambios, y trabajó, con la norma y la palabra, por que su alcance no se viera recortado por intereses ilegítimos ni interpretaciones obsoletas. Luchó con apasionamiento, pero sin vehemencia, siempre con lucidez y con aquella pedagogía que es tan necesaria (venceréis si convencéis).
Por eso y por otros motivos más personales, le vamos a echar mucho de menos.
Gracias por todo. Hasta siempre.